Compartimos un artículo de Público acerca del proceso judicial que culpabiliza a las mujeres que denuncian malos tratos

Leeló aquí

A continuación publicamos un artículo del movimiento #MeToo de las compañeras de Socialist Alternative de EEUU

El debate sobre la emancipación y la liberación de la mujer trabajadora se ha vuelto a poner encima de la mesa al calor de los movimientos de mujeres de los últimos tiempos.

El sábado 25 de noviembre se celebró a lo largo y ancho de todo el mundo el día contra la violencia machista. En el Estado español decenas de miles de mujeres, jóvenes y trabajadoras, salimos a las calles en más de 50 manifestaciones para decir “¡Basta ya!” a una violencia estructural e institucional contra nosotras, amparada por el gobierno del PP y una judicatura machista y patriarcal. Basta ya de hipocresía, de lamentaciones y palabras vacías sobre pactos de Estado que permiten recortes brutales a los programas de ayuda a las víctimas, que las denuncias queden archivadas, que seamos las mujeres las que sufrimos directamente una austeridad que pagamos con nuestra precariedad, nuestros bajos salarios, nuestra dependencia económica. ¡Basta ya de todo ese sistema que se cobra decenas de vidas de mujeres cada año en todo el Estado, mientras el gobierno del PP mira hacia otro lado y propicia con sus políticas esta carnicería!

En estos días estamos viendo un espectáculo bochornoso. Ha comenzado el juicio de la violación múltiple en San Fermines a una joven de tan solo 18 años. Una vez más, como en tantas otras ocasiones, estamos viendo cómo se somete a juicio a la víctima en vez de a los culpables. La justicia machista que, como en el caso de Juana Rivas se puso del lado del maltratador y la obligó a entregar a sus hijos, ahora vuelve a posicionarse exponiendo a un juicio sumarísimo a la víctima en vez de responder con contundencia contra los agresores.

La televisión es uno de los lugares en los que la labor para normalizar y justificar el tratamiento machista contra las mujeres es más sangrante. Este verano tuvimos que soportar cómo el programa Espejo Público de Antena 3 entrevistaba en más de una ocasión a Francesco Arcuri, el exmarido de Juana Rivas, denunciado y condenado por pegarla, para que pudiera mostrar su lado más humano, presentarse como un padre desesperado por no poder ver a sus hijos con la excusa de dar “su versión” del maltrato mientras a ella se la juzgaba, no sólo en los tribunales sino de plató en plató por negarse a entregar a sus hijos a un maltratador.